viernes, 31 de mayo de 2019

DETRÁS DO MARCO (VIGO)



    "Anónimas", de Gemma Marqués, recala en Vigo


   La artista desembarca con más acuarelas que amplían su proyecto




A  las sutiles pero coloristas heroínas y musas anónimas que ha editado en papel la artista GEMMA MARQUÉS se unirán mañana nuevas acuarelas en 3D, con una tercera dimensión remarcada por luces led. La pintora afincada en A Guarda expande a Vigo (Detrás do Marco) su proyecto "Anónimas", que comenzó también con murales en espacios urbanos de Tomiño.
 
 
 
Anónimas. Retratos de musas cotidianas", de Gemma Marqués (Burgos, 1981) son treinta y seis páginas a todo color sobre papel reciclado con acuarelas inspiradas en mujeres cotidianas y surcadas por el texto feminista de Lola Costas. Una aventura editorial -en castellano y gallego- que ya va por la segunda edición y que recala este sábado en Vigo. La autora protagoniza un acto con entrada libre en Detrás do Marco (20.00 horas) en el que se venderán y firmarán libros, además de abrirse una exposición de acuarelas con luces led´.
 
El proyecto de "Anónimas" lleva ya una singladura que transcurrió por la Casa Taller -un punto de interés creativo en el frontal marítimo de A Guarda- y también por Pontevedra, Allariz (Ourense) y prevé llevarlo a Tui y Santiago. Su proyecto se ha hecho público -y notorio- también con las pinturas en murales urbanos en el concello de Tomiño. La reacción de los vecinos está retroalimentando a la autora. La artista espera que las pinturas se expandan próximamente a más concellos.
 

Mientras espera, y como no para, ha dado un curso universitario sobre mujeres artistas. Gemma Marqués pone el foco en "Anónimas" en las protagonistas de trabajos invisibilizados que, sin embargo, dotan de sentido el día a día y el futuro colectivo.
 
"Es un homenaje a las mujeres corrientes, trabajadoras que muchas veces están en la sombra. Madres, hijas o hermanas", reconoce. "Anónimas" se ha inspirado precisamente en eso: en féminas de todos los días.
 
El trabajo que mañana presenta en Vigo es el primer libro de acuarelas que publica esta retratista gallega de adopción, que confiesa: "Están inspiradas en mujeres de carne y hueso. Hay muchas gallegas, una holandesa, una parisina..." las modelos proceden de diversos universos que coexistieron con la artista, aunque esta reconoce que "fueron surgiendo poco a poco".
 
 
 
 

lunes, 27 de mayo de 2019

UNA VISITA A OPORTO



SERRALVES EN FESTA




SERRALVES EM FESTA 2019
del 31 de mayo 2019 al 02 JUN 2019
 
Serralves en Fiesta es un evento cultural, multidisciplinar y libre, para toda la familia, promovido por el Museo de Arte Contemporáneo de Serralves desde 2003. Siempre ocurre a finales de mayo / principios de junio, en un fin de semana y ofrece a los visitantes una programación de 40 horas consecutivas - desde las 8h00 de sábado a 24h00 de domingo - que incluye música, danza, teatro, performance y circo contemporáneo. Ya es uno de los mayores eventos culturales de la ciudad y recibe, anualmente, cerca de 100 mil visitantes, entre portugueses y extranjeros.
 
Serralves em Festa regresa a la ciudad de Oporto. El que es uno de los mayores eventos de cultura contemporánea de Europa, trae 50 horas seguidas de programación del 31 de mayo al 2 de junio. En ese tiempo ininterrumpido tienen cabida la música, la danza, performance, circo, teatro, exposiciones  muchas otras actividades, todas gratuitas, que se desarrollarán en los jardines, en el parque, en la Fundación y en el espacio museístico.
 
A lo largo de los años, Serralves em Festa se ha convertido en punto de parada obligada de miles de visitantes y en 2018 batió todos los récords al recibir a más de 249.000 personas. En esta decimosexta edición el lema es "Celebrar Serralves" con motivo del trigésimo aniversario del museo, haciéndolo inclusivo no solo del arte y la cultura, también del pensamiento, el medio ambiente y el paisaje. En 2019 continúa la apuesta por la programación dedicada a niños y familias durante todo el fin de semana.
 
Entre las muchas propuestas de las más de 50 horas seguidas están actuaciones musicales, performances con las exhibiciones de Emmanuelle Huynh, Volmir Cordeiro o Chloé Moglia.

Hablando de las exposiciones, destacan la de Joana Vasconcelos "I´m your mirror", a la que se suman las muestras de Susan Hiller y Antoni Muntadas.

MÁS INFORMACIÓN
 
SUSAN HILLER

JOANA VASCONCELOS

 

sábado, 25 de mayo de 2019

NOTICIA DE "EL PAÍS"



     “Hay un red de museos españoles insostenible”


El profesor y crítico Juan Albarrán publica un ensayo sobre las grandes disputas en el arte contemporáneo nacional


El profesor y crítico de arte Javier Albarrán, en el Museo Reina Sofía, el pasado marzo
El arte español posterior a la dictadura ha sido escenario de constantes desencuentros entre creadores, directores de museos, comisarios y gestores culturales. Bastante despolitizado desde la disolución en 1987 de la Célula de Pintores del Partido Comunista de España, su imagen interior y exterior no ha conseguido ser reconocible ni homologable. La cultura del pelotazo alejada de la creación territorial es una de las causas de esa falta de identidad del arte español más reciente, concluye el profesor y crítico Juan Albarrán (Zamora, 1981) en un ensayo titulado Disputas sobre lo Contemporáneo, editado por Producciones de Arte y Pensamiento.
 
El libro se centra en lo ocurrido en el arte en España desde 1960 hasta 2018 y trata de ser un compendio de las pequeñas historias y sus correspondientes enfrentamientos que han protagonizado los diferentes agentes artísticos. El autor, perteneciente al Departamento de Historia y Teoría del Arte de la Universidad Autónoma de Madrid, precisa que habla de pugnas por el poder a partir la Transición, cuando el sistema del arte se reestructura y cambian las expectativas de los agentes. A partir de entonces, explica, las instituciones culturales crecen y se multiplica la apertura de museos, centros de arte y todo tipo de eventos, en los que los personalismos tienen gran importancia.
 
En el libro se relatan algunos encontronazos célebres, como el protagonizado en 1991 por el crítico Juan Manuel Bonet y el artista Francesc Torres. Bonet alertó en la revista Cyan de que se estaba volviendo al "arte comprometido por su dogmatismo, falta de originalidad y escasa entidad estética". Decía que eran artistas de extrema izquierda armados con lemas de extrema derecha. Torres, conceptualista catalán, respondió en la publicación de arte Lápiz que el texto de Bonet era la venganza de un señorito. En las 232 páginas del libro, Albarrán aborda otros casos. Pero vuelve una y otra vez sobre los conceptos diferentes de entender el arte, por ejemplo entre los teóricos José Luis Brea y Rafael Doctor. "En sus respectivos proyectos se pueden ver dos modelos contrapuestos de defender el arte. Brea sostiene un modelo tenso, intelectual y sofisticado. Doctor responde a lo celebratorio y lo banal".
 
Cuando se le plantea que Brea pudo representar una manera muy intelectual de abordar el arte, pero que Doctor, como creador y director del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León (MUSAC) de León, implantó un modelo que después fue copiado por todo el territorio español, Albarrán contesta que el MUSAC representa "las dinámicas más perversas del mundo del arte relacionadas con lo superficial, con programaciones expositivas obsesionadas con lo internacional y un profundo desprecio por las agendas y artistas locales. El caso de León lo conozco muy bien porque procedo de esa zona y la he estudiado a fondo. Había un tejido artístico muy interesante comprometido con la región y con los problemas de las personas que fue pisoteado. Primero con Rafael Doctor y después con su sucesor, Agustín Pérez Rubio".
 

Museos insostenibles

Lo grave del ejemplo del MUSAC, según Albarrán, es que se convirtió en un ejemplo que intentaron imitar otros muchos, obsesionados por un horizonte de internacionalización. Ligados al desarrollo  urbanístico y turístico vinieron después el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM), el Guggenheim en Bilbao y, más recientemente, el caso de Málaga, entre otros. "El efecto imitación ha sido tremendo y al final nos encontramos con una red de museos que se ha demostrado que es insostenible. Muchos han cerrado y otros sobreviven de mala manera, en función del presupuesto que les otorguen los políticos, porque no tienen vida propia al margen de los poderes públicos. Se encuentran en estado comatoso y la comunidad en que asientan no les va a apoyar".
 
Como ejemplos comatosos señala los museos de arte contemporáneo de Valladolid o Gijón. En positivo, elige el Centro de Arte Dos de Mayo de Móstoles (Madrid). Del Reina Sofía califica su programación expositiva de "sólida e interesante", pero considera que necesita una mayor coherencia en sus actividades públicas.
 
Finalmente, en el libro cita pocos nombres de artistas, a excepción de Santiago Sierra, Dora García o Ana Laura Aláez. Lo justifica diciendo que, en general, los artistas españoles huyen de lo discursivo. "No escriben. Son ágrafos. Ni siquiera participan en manifiestos. Se van a molestar, pero me temo que se han quedado anclados en una visión anticuada del arte. Tienen miedo a comprometerse y les falta actitud crítica".
 
(EL PAÍS 25-05-2019)
 

viernes, 24 de mayo de 2019

CUBISMO



El Reina Sofía y Fundación Telefónica lanzan un innovador curso online sobre Cubismo




El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía lanza un novedoso curso sobre Cubismo. Se trata del primer MOOC, curso en línea dirigido a un número ilimitado de participantes, realizado en un museo de arte contemporáneo con el objetivo de "mostrar la riqueza y el potencial educativo" de sus respectivas colecciones.

 
El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y la Fundación Telefónica presentan ‘El cubismo en la cultura Moderna. Un curso del Museo Reina Sofía y Fundación Telefónica’, primer MOOC (curso en línea dirigido a un número ilimitado de participantes) de cubismo realizado en un museo de arte contemporáneo, con el objetivo de "mostrar la riqueza y el potencial educativo" de sus respectivas colecciones, destacando de paso la importancia del propio movimiento.
 
Según ha informado el museo, el Reina Sofía y la Fundación Telefónica plantean con este curso abierto "convertirse en una referencia internacional de la divulgación del cubismo y de su influencia posterior como la vanguardia artística más relevante del siglo XX".
 
De hecho, este curso toma como punto de partida el paralelismo entre el contexto de los inicios del siglo pasado y el actual. Se abrirá el 17 de junio, durará cinco semanas y en otoño se celebrará una nueva edición.
 
El curso, desarrollado por el jefe de actividades culturales de Museo Reina Sofía, Chema González, el profesor de la UOC, Joan Campás Montaner, la responsable de Colecciones e Itinerancias de Fundación Telefónica, Laura Fernández Orgaz, y el equipo de Colecciones de Fundación Telefónica , va dirigido a todo aquel que quiera acercarse a una mayor comprensión del arte moderno y contemporáneo, a las ideas que motivaron el cubismo, sus conexiones con otros fenómenos sociales y culturales del siglo XX.
 
Además, el curso se compone de un gran número de videos cortos de cuidada producción que permiten acercar a los nuevos públicos digitales el desarrollo de este influyente movimiento moderno.
 
Juan Gris, La ventana de las colinas, óleo sobre lienzo, 1923. Colección Telefónica. Fundación Telefónica, Museo Reina Sofía.
 
 
La directora general de Fundación Telefónica, Carmen Morenés, y el director del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, presentaron el jueves 23 de mayo en el Museo, “El cubismo en la cultura moderna”, primer MOOC (Massive Open Online Course) que se realiza sobre este movimiento y con el que ambas instituciones quieren mostrar la riqueza y el potencial educativo de sus respectivas colecciones.
 
El curso, de carácter online, gratuito y de libre inscripción, pretende convertirse en una referencia internacional de la divulgación del cubismo y de su influencia posterior como la vanguardia artística más relevante de inicios del siglo XX. En él se analizan algunas de las obras históricas fundamentales de artistas cubistas de la talla de Picasso, Braque, Juan Gris o María Blanchard, Cézanne o Matisse, por citar solo algunos ejemplos.
 
 
 

martes, 21 de mayo de 2019

POMPIDOU MÁLAGA




     Medio siglo de Matisse en el Pompidou Málaga


Málaga se adelanta a las celebraciones parisinas del 150 aniversario de Henri Matisse con una exposición que pone de relieve la valía de este artista

 
 
La conmemoración del 150 aniversario del nacimiento de Henri Matisse (1869-1954) tiene su primera entrega en esta exposición del Centre Pompidou Málaga, «avanzadilla» de la que llegará a la sede parisina de esta institución a comienzos del año próximo (nació el 31 de diciembre). La muestra, por encima de centrarse en un momento concreto de la fecunda trayectoria de Matisse, proyecta una imagen de conjunto a través de medio centenar de piezas realizadas desde 1900. Pero, sobre todo, se busca mostrar al artista como un creador en continua experimentación y cuestionamiento de los medios que emplea; tanto como un generador de nuevas soluciones, como sus trascendentales papeles pintados y recortados que aparecen a finales de los treinta y que, debido a la convalecencia de su grave intervención quirúrgica en 1941, que le postraría durante años, adquirirían protagonismo en los cuarenta y se convertirían en la base de ambiciosas intervenciones murales y ejercicios que bien pudieran recibir la consideración de «obra de arte total» (gesamtkunstwerk), como la Capilla del Rosario de Vence (vidrieras, pintura mural, ropa litúrgica...), inaugurada en 1951. De este modo, asistimos a la amplitud de disciplinas que desarrolla Matisse y -lo que es más importante- al continuo trasvase y diálogo entre ellas.
 
«Odalisca de pantalón rojo», lienzo de 1921

Curiosidad y búsqueda

Sobre esa continua experimentación; sobre la pasión y curiosidad que despierta el proceso creativo; sobre la ilusión que genera lo desconocido o por acontecer; sobre los retos a los que se enfrenta, se asientan el sentido y el título de esta muestra. En 1927, Matisse afirma: «Tengo varios cuadros en marcha. Siento la curiosidad que suscita un país nuevo». Lo dice alguien que emprendió una continua búsqueda por numerosos países, incluido España en un viaje en 1910 junto a Francisco Iturrino, del sentido de lo decorativo y de cierta noción de «lo oriental». Ciertamente, las obras arrojan la continua experimentación matisseana, tal vez sin la radicalidad de otros episodios y actores de la vanguardia, con la fe de nunca perder el carácter sensorial y hedonista de la obra que asegurase el vínculo con el receptor. En parte porque la suya no fue una furia anicónica en pos del concepto, sino una furia expresionista en pos de la sensualidad.
 
Justamente, la exposición arranca con algunos valiosos ejemplos fovistas, en los que el color es enunciado de un modo fiero y desatendiendo la fidelidad para con el referente. No obstante, hay periodos en los que la simplicidad, el esquematismo y la economía de medios hacen que sus obras frisen la abstracción, pero como ocurre con Picasso, el artista galo es consciente de que se trataría de un punto de no-retorno que conviene sortear.
 
'El violinista en la ventana' (1918) es una de las piezas destacadas de las exposición

 


Ese afán curatorial por presentar la naturaleza expansiva e inquieta de Matisse, tanto como el desapego para con la explotación de unas fórmulas que le habían reportado el éxito -subyacen en esto autoexigencia y nomadismo-, se traslada a la puesta en escena. Esto es: sentimos el sistemático debate interno que tuvo Matisse en torno a la línea y el color, a su valoración por separado o en alianza. En ese cuestionamiento, la luz hace acto de aparición en los años veinte con su traslado a Niza.
 

Otra disquisición que embarga al artista es la transmisión del sentimiento, para cuyo fin varía los procedimientos a lo largo de su carrera. También, el itinerario expositivo, marcado por lo cronológico, incide en elementos de diálogo y nuevos procedimientos, como son el arte africano y primitivo, la búsqueda de lo oriental, la aparición del factor lumínico y, muy especialmente, el uso de los papeles pintados y «dibujados con tijera». El relato se articula en seis secciones cronológicas que vienen, en mayor o menor medida, a converger con estos episodios trascendentales para la conformación de su producción.

Palabras mayores


La representación escultórica hace crecer enteros esta muestra. Por un lado, evidencia la deuda temprana con Rodin. Por otro, observamos cómo fija en lo volumétrico asuntos que le ocupan pictóricamente, como las bañistas; de hecho, se establecen diálogos entre figuras escultóricas y dibujos preparatorios para Lujo I (1907). Asimismo, algunas esculturas y pinturas evidencian el peso de la estatuaria y máscaras africanas, incluso su interés en documentos etnográficos, como se evidencia en Dos negras (1907), cita de una foto aparecida en una revista. Más allá de estos paralelismos iconográficos, la escultura fue una disciplina querida por Matisse, si bien siempre eclipsada por su pintura. En su continua reflexión teórica en torno a la creación, irrumpe en numerosas ocasiones. Lo hará cuando empiece a trabajar los papeles pintados y recortados. Matisse alberga cierta analogía entre su «dibujo con tijeras» y lo escultórico: «Recortar desgarrando los colores me recuerda la talla directa de los escultores. Este libro -se refiere a Jazz, editado en 1947- ha sido concebido con este espíritu».
 
Y entre tanto, vamos viajando «de país en país», de obra en obra, sumidos en la intensidad y problemáticas de piezas icónicas como Mujer argelina (1909), Odalisca con pantalón rojo (1921) o el portentoso Gran interior rojo (1948).

 





 
 
 

Henri Matisse

Un país nuevo.
Centro Pompidou Málaga. Pasaje Doctor Carrillo Casaux, s/n.
Comisaria: Aurélie Verdier.
Hasta el 9 de junio

 
 

miércoles, 15 de mayo de 2019

REAL JARDÍN BOTÁNICO MADRID



                         Mat Collishaw. Dialogues




Una especial selección de las obras del creador británico Mat Collishaw se presenta por primera vez en España desde el  30 de marzo en el Pabellón Villanueva del Real Jardín Botánico. "Mat Collishaw. Dialogues" es la primera exposición organizada por la Fundació Sorigué en Madrid.

"Mat Collishaw. Dialogues" es también la primera exposición individual en España del artista y ofrece una completa visión de su mundo oscuro y cautivador, a través de sus obras más trascendentales y piezas pocas veces expuestas, incluyendo las creaciones que forman parte de la colección de arte contemporáneo de la Fundació Sorigué.

A través de esculturas, fotografías, películas e instalaciones de sus últimos 20 años de carrera, la muestra presenta obras que envuelven al público en un mundo crepuscular entre lo seductor y lo repugnante, lo familiar y lo impactante, lo poético y lo morboso. La belleza de la obra de Collishaw es convincente, seductora, cautivadora e hipnótica, pero también repulsiva en la medida que incita al espectador a percibir las fantasías más oscuras de su interior.

La exposición se estructura en torno a dos ámbitos, que corresponden a su vez a las dos alas del Pabellón Villanueva donde se ubica la exposición, y que representan algunas de las obsesiones de Collishaw: la naturaleza y la historia del arte.

La Fundació Sorigué, con sede en Lérida, impulsa desde hace más de 25 años el retorno social del grupo empresarial Sorigué a través de actividades sociales, educativas y culturales, especialmente en aquellos territorios donde la compañía está presente. Entre sus objetivos destaca su vocación de acercar el arte contemporáneo a todos los públicos. Para la Fundació Sorigué esta exposición supone aportar valor a través de la cultura a Madrid, ciudad con la que el grupo empresarial Sorigué está vinculado desde hace más de dos décadas.


Sobre Mat Collishaw

Mat Collishaw (Notthingham, 1966), vive y trabaja en Londres. Completó sus estudios de Bellas Artes en el Goldsmith's College en 1889, formando así parte de la importante generación de jóvenes artistas británicos que empezaron su trayectoria en el mismo centro, como Damien Hirst o Tracey Emin. Su primera exposición en solitario fue en 1990.

Especialmente relevante es su participación en 1997 en la importante muestra "Sensation: Young British Artists de la colección Saatchi" en la Royal Academy de Londres. En esa muestra presentó "Bullet Hole" (1988), una obra fotográfica de grandes dimensiones que mostraba un primer plano de una herida sangrando. Esta imagen hoy icónica estableció la inclinación de Collishaw por el uso de imágenes que a la vez son visceralmente impactantes y extrañamente bellas.
Sobre la Fundació Sorigué

La Fundació Sorigué impulsa desde 1985 la vocación de retorno a la sociedad del grupo empresarial Sorigué, a través de actividades en el ámbito social, educativo y cultural. Tras una extensa y exitosa experiencia en Cataluña, la fundación extiende además sus actividades a otras comunidades, empezando por Madrid, donde Sorigué está presente hace más de dos décadas.

La Fundació Sorigué, en su vocación de acercar el arte contemporáneo a todos los públicos, ofrecerá 1.600 entradas gratuitas a la exposición a través de su página web, que incluirán visita guiada, así como un programa educativo y diversas actividades que girarán en torno a la exposición.


 
 

HASTA EL 24 DE MAYO
 

sábado, 11 de mayo de 2019

ARCO EN LISBOA



        Arco ‘se muda’ a la desembocadura del Tajo


La feria internacional de arte contemporáneo celebra su cuarta edición en Lisboa. De forma paralela también abre sus puertas Ars Libris

 
Imagen de una obra en la edición de Arco Lisboa 2018, que este año acogerá a 52 galerías.
 No ha elegido mal sitio la Feria Internacional de Arte Contemporáneo para celebrar su edición portuguesa. Lisboa presta a la cita su edificio de la Cordoaria Nacional (cordonería nacional), proyectado por el marqués de Pombal en 1771. Reconocido como Monumento Nacional, está compuesto por tres talleres extendidos a lo largo del Tajo, en el sitio del antiguo fuerte de San Juan, donde se producían cuerdas, cables y velas para los buques. La cita, organizada por Ifema y la Cámara municipal de Lisboa, acogerá su cuarta edición del 16 al 19 de mayo y recibirá a 52 galerías, nueve proyectos individuales, seis galerías de África, charlas y encuentros; propuestas artísticas internacionales y por primera vez la feria Ars Libris, que tiene ediciones en Madrid y Barcelona.
 
“Portugal tiene una escena maravillosa de artistas y galerías. Queríamos dar visibilidad a ese contexto creativo y a las galerías, coleccionistas y artistas”, cuenta Maribel López, directora de la feria. La obra seleccionada abarca las vanguardias históricas, los clásicos contemporáneos y el arte actual. “Hay muchísimas conexiones entre Portugal y España, de muchos años. Es una escena artística muy grande con contenidos muy interesantes. Para el tamaño que tiene el país, el número de galerías es sorprendente, es muy alto. Esta exigencia nos obliga a ganar cada año un espacio nuevo en la Cordoaria para dar cabida a las propuestas, secciones y galerías… Contamos con 300 metros de largo y 12 de ancho. Aprovechamos la forma y el valor histórico del edificio, con su luz, los patios, los torreones… Es un viaje entre el pasado y el futuro”. Lisboa fue elegida como un puente entre la Península y Latinoamérica, especialmente Brasil. La transferencia de conocimiento y cultura se hace patente en todas las secciones, también en la parte editorial, que celebra su primera edición con Ars Libris, la feria de la edición traída de Madrid y Barcelona.
 
“La tradición de libreros de los portugueses es mayor que la nuestra. Además, son los mejores editores de fotolibro de Europa. Son interesantes en los años cuarenta, cincuenta, setenta… Pero también lo son hoy. En Portugal hay galerías especializadas en fotolibro, pero es difícil que salgan de sus circuitos, excepto si se trata de Brasil. ArcoLisboa intenta facilitar que entren en contacto con editores de otros sitios”, comenta Rocío Santacruz, fundadora y directora de Ars Libris. “Temíamos que el primer año costara convocar a los expositores, pero el arranque de Ars Libris ha sido fantástico; tenemos 40 expositores… El fotolibro en Portugal tiene gran implantación y también hablaremos de autoedición. Mostrarán formatos de artista y edición; habrá libros, octavillas, papel plegado”, detalla. Santacruz celebra el momento que vive el sector y que podrá respirarse en la feria. “Durante un tiempo temíamos que el libro desapareciera, que el papel dejaría de existir. Y lejos de eso, la digitalización ha traído una valoración por el libro que antes no tenía. Se cuida más, se sabe que es una pieza mucho más valiosa, casi única; se experimenta, se le da otro sentido, y cada vez hay proyectos más vivos y experimentales; incunables, piezas limitadas, retirajes…”.
 
“La primera edición arrancamos con 45 galerías. Era primordial dejar claro que la protagonista era la escena portuguesa; que sus galerías y artistas estuvieran bien representados. Este año tenemos 71 galerías. Al principio arrancamos una sección de opening que correspondía a la efervescencia de las nuevas galerías portuguesas, de todos los tipos, formas y ciudades, desde Lisboa hasta Oporto. Los torreones de la Cordoaria nos sirven para dar espacio a esas propuestas que no encajan con el modelo tradicional”, cuenta la directora de Arco, en referencia al Torreão Poente, que acogerá nueve proyectos de artistas individuales presentados en la feria por sus galerías. Entre ellos, Daniel García Andújar, Gerold Miller y Nicolás Grospierre. La directora de la feria celebra la mezcla de estilos e idiomas que crece cada año y que ayuda a posicionar a Portugal, pero también a reflexionar sobre el arte y sus corrientes. “Nos gusta representar el diálogo entre el arte portugués y el internacional y cómo se mezcla con galerías de España, Brasil, Australia, Reino Unido…”. Este año destaca, además, la presencia de galerías del norte de Europa y de África, que representa la parte “que dota de personalidad e investigación” a la feria, con propuestas de Angola, Uganda, Mozambique y Sudáfrica bajo el título África em Foco, comisariada por Paula Nascimento, que incluirá conferencias sobre el arte contemporáneo más moderno de África con la participación de Raphael Chikukwa y Azu Ngagbogu.
 
“Esta feria nos permite reaccionar a las cosas que pasan, probamos si los formatos tienen éxito y vamos ampliándolos”, concreta López, que adelanta que el formato podría repetirse en próximas ediciones. Entre las 72 galerías y los 17 países invitados destaca un programa general, formado por 51 galerías y 16 países, entre las que sobresalen Vera Munro y Georg Kargl, novedades en la cita; repiten los artistas Krinzinger, Greengrassi, Pietro Sparta y Vermelho. El programa opening se centrará en galerías con trayectorias de un máximo de siete años que invitarán a reflexionar sobre la nueva escena estética, y serán 11 galerías comisariadas por João Laia que incluye obras de Lehmann + Silva, de Oporto, o Fran Reus, de Palma de Mallorca. También habrá tiempo y espacio para el debate y la reflexión en torno al arte y el coleccionismo con el foro de coleccionismo Millennium Art Talks.
 
 

Profesionales

La feria tendrá un espacio para el público especializado, cerrado al general. Serán puntos de encuentro para comisarios y expertos en arte de todo el mundo. “Estos debates brindan la oportunidad de compartir reflexiones, intercambiar experiencias y proyectar nuevas propuestas”, apuntan desde la feria. Participarán Pierre Bal-Blanc, Virginija Januškevičiūtė, Agniya Mirgorodskaya, Taaniel Raudsepp, Beatrix Ruf y Joanna Zielinska, bajo la batuta de João Laia. También se acoge el encuentro de museos, que analizará el papel de una institución portuguesa en diálogo con otras extranjeras. En las sesiones intervendrán profesionales como Rosa Ferré, Sandra Patron, Katarina Pierre, Manuel Segade, Wato Tsereteli y Philippe Vergne.
 
(EL PAÍS)

martes, 7 de mayo de 2019

XOSÉ ABAD



        "Nais e fillas", cambios en las generaciones

La exposición fotográfica de Xosé Abad puede visitarse en el Café Moderno



El Café Moderno acoge un nuevo proyecto fotográfico del artista Xosé Abad, bajo el título "Nais e fillas. Dúas xeracións, un obxectivo", una exposición en la que el fotógrafo muestra a mujeres de distintas generaciones, madres e hijas, unas frente a otras, para revelar los cambios alentadores que se dieron en la sociedad en favor de las mujeres.
 
En el acto inaugural estuvieron el fotógrafo autor de la muestra, Xosé Abad; el responsable del Área Educativa de Afundación en Pontevedra, Alberto Blanco; y la coordinadora adjunta del Área de Cultura de Afundación, Paloma Vela.

"Nais e fillas. Dúas xeracións, un obxectivo" se podrá visitar hasta el próximo 1 de junio, de lunes a viernes en horario de 17.30 a 20.30 horas, y los sábados de 11 a 14 y de 17.30 a 20.30 horas.

LA EXPOSICIÓN

Este trabajo expositivo tiene como finalidad retratar y presentar al público dos imágenes de las mujeres a través de dos generaciones que, sin estar muy distanciadas en el tiempo, reflejan una diferencia laboral y sobre todo vital. La intención del autor es mostrar este salto generacional en el retrato de madres e hijas, dos generaciones de mujeres con una relación de afectividad, con vidas diferentes ligadas a trabajos muy diferentes, que trascienden de lo privado y particular a lo genérico y emblemático, convirtiéndose en representantes de dos formas de vivir.
 
Cada pareja representada aparece en tres fotografías: en la primera podemos ver a las madres que responden a la imagen tradicional de la mujer, en muchos casos ligada al sector primario y con escasa formación académica, pero con mucho trabajo y oficio. Madres que, con un gran esfuerzo, procuraron un futuro distinto para sus hijas, plasmado en una forma de vida y en oportunidades que ellas no tuvieron. En la segunda fotografía podemos ver a las hijas, mujeres que representan a la generación que se incorpora masivamente al mundo del trabajo empresarial y a la sociedad desde una posición enfrentada a los estereotipos tradicionales. Trabajadoras de los sectores industrial y de servicios y con una buena calificación profesional. En la tercera imagen aparecen juntas, próximas y cómplices, sabias y satisfechas del camino recorrido.

 
 
La finalidad de este proyecto, organizado en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer el pasado 8 de marzo, es retratar y presentar al público dos imágenes de mujeres a través de dos generaciones que, sin estar muy distanciadas en el tiempo, reflejan una diferencia laboral y sobre todo vital. El eje de la muestra son ocho grupos fotográficos, formados por tres imágenes cada uno, en los que se presentan a las protagonistas a tamaño natural. A través de los textos que las acompañan, los espectadores podrán conocer algún aspecto destacado de su vida y sus reflexiones sobre el papel de la mujer en la sociedad, convirtiéndose así cada tríptico en un relato personal, familiar y colectivo.
 
 

sábado, 4 de mayo de 2019

CARLOS MASIDE



            Combarro: el renacer espiritual de Maside


    Se exponen por primera vez más de 100 obras que el pintor realizó       durante su vorágine creativa en la villa en 1952


HASTA EL 16 DE JUNIO



Tras años de exilio interior y aún herido por las secuelas de la guerra civil, el artista Carlos Maside se traslada a Combarro en agosto, septiembre y octubre de 1952. Allí vivirá una vorágine creativa, inspirado por los hombres y mujeres del mar, los niños, las calles, las tabernas... Sigue el día a día del "Olimpo combarrés", como lo describió Paz Andrade, un universo de gentes y paisajes que es el protagonista de la exposición que hoy abre sus puertas en el Museo. Más de 100 obras hablan de un tiempo que gracias a ellas sobrevive en la memoria. "En Maside", destacan los organizadores, "está representada una época de Galicia".
 
 
 
A principios de los 50 la vida de Carlos Maside está truncada. Tras la guerra civil y el expediente de depuración ha sido apartado de la plaza de profesor de Dibujo. Hace años dejó el grabado, los periódicos para los que trabajaba fueron incautados y pierde la última esperanza de firmar los grandes murales que admira en sus colegas mexicanos. En su derrota y su extrañamiento, acaricia un horizonte, Combarro, sus casas, sus marineros, sus mujeres, sus niños.. El muelle al amanecer y ese olor a mar? Todo lo que arropará en los veranos de 1952 y 1953 su renacer espiritual. 
 
Ese momento único de madurez de Carlos Maside (Pontecesures, 1897-Santiago, 1958) fructificó en cientos de obras. "Trabaja día y noche", explica el profesor de la Universidad de Vigo Rafael Vallejo, comisario con María Esther Rodríguez Losada de la exposición Carlos Maside en Combarro, 1952. Bosquexos, debuxos e acuarelas que hoy abre sus puertas en el Museo.
 
 
Después de años de aislamiento (detesta la vida social y política de los vendedores, hostiles a la cultura) Maside disfruta en Combarro de las clases trabajadoras a las que se siente unido. Y lo hace sin descanso: a partir de las 6 de la mañana está en el muelle, donde llegaba el pescado fresco y se concentraban los marineros y las mujeres. "Le gustaban los grupos, los mercados", recuerda Rafael Vallejo, de modo que desde ese primer momento del día el artista "va siguiendo la secuencia de la vida", retratando a los hombres del mar, sus mujeres e hijos.
 
"Es el retrato de un pueblo relativamente pobre, emigrando o camino de ello", añaden los organizadores a propósito de un momento en el que el éxodo de los gallegos vuelve a ser masivo. Muchos de los niños retratados en la exposición saldrían años después hacia Suiza o Alemania y es en general una foto colectiva "de una época de Galicia, no se circunscribe a Combarro".
 
 
Maside no se separa de sus pinceles y por la tarde se dedica a los posados en un taller improvisado. Fruto de este torbellino creativo son óleos, acuarelas, dibujos a lápiz y a tinta...
 
Así, ante la mirada del espectador van pasado los paisanos con boina y pantalón ancho acodados en la barra de la taberna, arreglando las redes, pescando... O sus mujeres e hijas en la fuente, pelando patatas, cuidando a los bebes, llevando cestas o baldes, enlatando en la fábrica. ..
 
 
Entre ellas está A peixeira, la única obra de la exposición que el autor vio expuesta y que pintó en Combarro al natural. También se muestran otras maravillas como Mariñeiro o la joven mujer cuya potente mirada sigue interpelando al espectador.
 
No faltan las niñas, pequeñas como Gina o Anita, leyendo, calcetando. Y la arquitectura, los lugares, los espacios, el puerto...
 
La exposición es una oportunidad única: se exhiben por primera vez más de un centenar de trabajos que la convierten en una referencia "tanto cuantitativa como cuantitativamente", recuerda el comisario.
 
A mayores supone la culminación a un trabajo de registro y catalogación de la producción del artista, proceso que también incluye un amplio catálogo hasta documentar un total de 312 obras.
 

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miércoles, 1 de mayo de 2019

OKUDA EN CIUDAD REAL



Arte urbano en la España vacía: así quiere Ciudad Real ser un museo al aire libre


Okuda interviene uno de los silos y comisaría el proyecto.
No pueden dejar de mirar hacia arriba. Desde hace unas semanas, a Consuelito y Juan lo único que les interesa es lo que pasa a 40 metros de altura, en el monstruoso edificio que tenemos justo enfrente. Aquí, las grúas poco a poco van dejando ver el rostro de una mujer con una flor en el pelo, un niño con los brazos cruzados, un caballo multicolor, una guitarra española que roza las nubes... En definitiva, un paisaje mágico que ellos mismos han contribuido a pintar y que en breve dará una nueva vida al antiguo silo de Calzada de Calatrava.
 
El pueblo natal de Pedro Almodóvar se transforma estos días en un escenario molón gracias a Titanes, el proyecto inclusivo en el que 450 personas con discapacidad intelectual -como Consuelito y Juan- y algunos de los mejores artistas urbanos del mundo trabajan juntos para recuperar 10 de los enormes almacenes de grano ya sin uso repartidos por la provincia de Ciudad Real.
 
Herencia, La Solana, Malagón, Corral de Calatrava, Calzada de Calatrava, Porzuna, Villanueva de los Infantes, Manzanares (con dos silos) y la propia Ciudad Real participan en una acción que no sólo pretende convertir la llanura manchega en un espacio de referencia para los aficionados al post grafiti, sino también ofrecer una salida laboral a personas con síndrome de Down o autismo. Así, la idea es que quienes han colaborado en la intervención, los que se han manchado las manos con pintura, sean quienes dentro de unos meses hagan de guías a los visitantes que acudan a los espacios rehabilitados, bien como centro cultural (Calzada de Calatrava), como complejo deportivo (Manzanares)o como museo (Herencia).
 
«Cuando cerramos la tienda en la que vendíamos lo que se hacía en los centros ocupacionales queríamos sacar el talento de estos chavales a la calle», explica Alfonso Gutiérrez. «Y en esto apareció Okuda. Con él pintamos un primer muro en Puertollano el año pasado. Le pusimos 150 asistentes con discapacidad y el impacto fue brutal. Empezamos a ver cómo cambiaba la mentalidad de la gente».
 
Gutiérrez es el gerente de la asociación Laborvalía, la coordinadora de los 15 centros ocupacionales de Ciudad Real y la impulsora de Titanes con la plataforma creativa Ink And Movement. Okuda, por su parte, es el santanderino de 38 años que se ha convertido en el gran embajador nacional del nuevo muralismo con sus criaturas de anatomía geométrica y sus piezas colosales: una falla en Valencia, un rascacielos en Toronto, una escultura en Boston, un autobús de dos pisos en Hong Kong...
 
En este proyecto, Okuda ejerce al mismo tiempo de artista y de comisario. «Empecé pintando en sitios abandonados, así que para mí siempre han sido tesoros ocultos. Las estructuras de gran formato sin ventanas me interesan mucho, más aún si están en un entorno en el que no hay nada a su altura», señala a propósito de unos silos que se construyeron hace más de tres décadas y que, a falta de los soportes tradicionales del street art, vienen a ser el equivalente autóctono de los vagones de metro.
 
 Con guiños a películas como La mala educación y La flor de mi secreto, a El Quijote y a la orden de los templarios, de tanto arraigo en la zona, la pieza de Okuda posiciona a Calzada de Calatrava como destino preferente del museo al aire libre que quiere ser Ciudad Real. Una pretensión insólita si se tiene en cuenta que los grandes festivales del arte urbano en España -Asalto (Zaragoza) y Poliniza (Valencia)- son justo eso: urbanos. Titanes propone una extensión del término hacia la ruralidad, como a otra escala persiguen pueblos como Fanzara (Castellón), Castrogonzalo (Zamora) o Canido (Vigo).
 
El silo abandonado de Malagón, intervenido por el dúo belga Hell'O.
 
¿Cómo han acabado entonces en la España vacía, en lugares que ni sabrían localizar en un mapa, artistas de Australia (Fintan Magee), Brasil (Bicicleta Sem Freio), Bélgica (Hell'O) o México (Smithe)? «Este tipo de estructuras son un caramelo para quienes trabajan en el espacio público», reconoce Óscar Sanz, director de Ink and Movement. «Además, que fuese un impulso para la gente de Laborvalía y que se cumplan 15 años del Urban Art de Canarias, el primer festival de arte urbano sobre grandes formatos en nuestro país, ha hecho el resto».
 
Titanes salpica cifras tan mastodónticas como los propios almacenes de hormigón, algunos de los cuales todavía conservan el cartel original del Ministerio de Agricultura. Ahí van: 15 artistas, 6.000 latas de pintura en spray, 3.000 litros de pintura plástica, 15.000 metros cuadrados... Y varios días de lluvia y viento, que han hecho que algunos de los artistas se desesperen por la posibilidad de acabar fuera de plazo. «Ha sido la peor experiencia laboral de mi vida. No esperábamos este mal tiempo», reconoce Nuria Mora, integrante del Equipo Plástico.
 
Con los colores que proyecta el entorno del edificio en Google Maps, con un trazo tecnológico o alicatado con formas sinuosas, cualquier silo puede parecer a kilómetros de distancia chocante como el monolito de Kubrick.
 
Tal vez por eso, un alcalde de la zona se negó a que el silo de su pueblo se interviniese si primero había que pintarlo de blanco. O quizá sólo sea que estamos en tiempos de elecciones. En cualquier caso, el color político no ha sido determinante en la ejecución de Titanes: seis de los 10 silos están en pueblos del PSOE, y los otros cuatro, en territorio popular.
 
«He de reconocer que el estado en el que se encontraba, no sólo el edificio, sino la parcela en su conjunto, era una zona degradada que en algunos momentos tuvo situaciones de ocupación ilegal, de abandono real, incluso de peligro para chicos que se metían y subían por él», expone con orgullo Julián Nieva, regidor socialista de Manzanares, frente a los dos silos de su localidad.
 
Gutiérrez destaca que casi todas las críticas son positivas. «En Calzada, la gente mayor va camino del cementerio a limpiar las tumbas, con su sillita y tal, y se paran delante del silo». Y añade: «Una chica que tiene una clínica de fisioterapia escribió en Instagram: necesitamos estas cosas para que nuestros hijos puedan seguir viviendo aquí. Este año en el pueblo han nacido 20 personas y han muerto 80».
 
Tres integrantes de Equipo Plástico, junto a los dos silos de Manzanares.
(EL MUNDO)