miércoles, 27 de diciembre de 2023

ARTE EN NAVIDAD

 

Dalí, Picasso y Frida Kahlo también pasan la Navidad en Vigo




La galería AF presenta obras de estos artistas en una exposición que tiene como hilo conductor la figura femenina


Hace ahora dos años, el galerista Pablo Pardo abría una sala en la calle Ecuador, 69, al lado de El Corte Inglés, con el objetivo de derribar los muros creados durante años con un público que entra en museos pero no se atreve a cruzar las puertas de las galerías.

Su idea, un concepto que se acerca más al de una tienda a la que la gente entra sin miedo o vergüenza a no saber de arte, sigue en marcha para abrirse a un público nuevo y acercarle a creaciones de artistas actuales o en este caso, creadores del siglo pasado cuya obra ya es universal. La exposición Femi-Ismos presenta obras de autores de primera fila, como Picasso, Dalí, Frida Kahlo y Maruja Mallo, en una muestra que tiene como hilo conductor la representación de la figura femenina.

De Pablo Picasso se puede ver La femme, un bronce del año 1945 que fue del escultor Manuel Marín y heredó su viuda; de Frida Kahlo, un pequeño autorretrato sobre papel de una colección privada; de Maruja Mallo, Maniquí, «un dibujo precioso a carbón» datado en 1928; de Salvador Dalí, «una figura femenina onírica llena de sensualidad y misterio, es una acuarela sobre papel», destaca el experto, que lleva más de 20 años en el sector en el que comenzó al lado de su hermano, Severo.

Pardo indica que también hay obras de gran valor de artistas quizás menos conocidas a nivel popular pero con una trayectoria muy valorada, como una obra de 1965 de Joan Shemmel, autora feminista norteamericana muy influyente y ganadora del premio Lifetime Achievement, o piezas como una de los años 40 de Colmeiro. «Las obras de entreguerras son las más buscadas por coleccionistas y museos», explica el galerista.

La lista de autores del fondo de galería conforman una exposición que acerca a Vigo una inusual lista de creadores a la que se añaden contemporáneos como Iván Prieto, Soledad Penalta, Leiro o Menchu Lamas.

Para el experto en el sector, el acercamiento de los espectadores a las salas de arte no tiene por qué retraerles porque hay piezas para todos los bolsillos. «Hay pequeños y grandes coleccionistas, hay quien podría serlo pero prefiere gastar su dinero en coches de alta gama, y otros que tienen un coche corriente y los «ferraris» en las paredes», valora añadiendo que «depende de la inquietud de cada uno y de saber sobre este mercado, porque el arte es una inversión». En este sentido, afirma que es «un buen momento para comprar vanguardia histórica». En la exposición que está abierta hasta finales de enero cuenta también con autores gallegos como Seoane, Lugrís, Arturo Souto, Jaime Quessada, Cristino Mallo, Manzano Buciños, María Antonia Dans...

(LA VOZ DE GALICIA)

Teléfono: 604 04 07 93

CIRCULO DE BELLAS ARTES

 

EDUARDO MOMEÑE PRESENTA SUS ‘RETRATOS Y OTRAS FICCIONES’ EN MADRID


El Círculo de Bellas Artes acoge ‘Retratos y otras ficciones’ del fotógrafo bilbaíno Eduardo Momeñe, exposición que recoge cuatro décadas de su trabajo.




Retratos y otras ficciones’, de Eduardo Momeñe, se puede ver del 24 de octubre al 21 de enero en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.

Centrada en su trabajo de estudio, la exposición recoge más de cuatro décadas (desde 1978 hasta 2023) de producción del fotógrafo bilbaíno. Este viaje por su obra explora las fronteras entre la realidad y la ficción, con el enfoque puesto en el retrato, la figura y la puesta en escena con las que dota a sus imágenes.

Eduardo Momeñe aborda la fotografía a través de miradas individuales, concentrándose en cada una de ellas de forma única y completa. “Cada fotografía es un proyecto en sí mismo y la colección que podemos ver ahora es una reunión de esas obras independientes que en conjunto revelan un sentido y un diálogo23.

“En esta muestra he recogido la faceta de mi trabajo en la que más tiempo he invertido y es la del trabajo de estudio. En ese espacio es en el que me he sentido más cómodo, me traslada a una burbuja”, explica Momeñe.

El estudio, “mi pequeño búnker”, como él lo llama, es para Momeñe una especie de no-lugar en el que cualquier imagen es posible. Es un espacio donde se aísla y el mundo a su alrededor desaparece. “Me gusta su silencio, nunca fotografío con música. Hay un dato que me parece curioso, y es el de comprobar que casi todas las fotografías, a lo largo de más de cuatro décadas, están hechas en los mismos metros cuadrados, una inquietante máquina del tiempo”, describe el fotógrafo.

El estudio es el lugar elegido para los innumerables retratos (ente ellos los de Ouka-Leele y el Hortelano, o los de Miguel Bosé, Ágatha Ruiz de la Prada, John Berger, Carlos Saura, Luis de Pablo o Terenxi Moix), que Momeñe considera puestas en escena (como ocurre con las fotos posadas de modelos, músicos, deportistas o “estatuas vivientes”) en las que prevalecen el juego, la ambigüedad y la reflexión en torno a lo que es realidad y lo que es ficción. 

Retratos y otras ficciones’ se propone como un relato fotográfico en el que las imágenes están acompañadas de textos y vídeos. Para Momeñe la fotografía es, en sí misma, una forma de ficción. Cada imagen captura una realidad escenificada, aunque para él no sea necesario contar una historia en cada una de ellas; el autor prefiere que las fotografía hablen por sí mismas, permitiendo al espectador construir su propia narrativa a partir de ellas.



Eduardo Momeñe

Eduardo Momeñe (Bilbao, 1952) vive la fotografía desde la enseñanza, el estudio del lenguaje y el “placer” de hacer fotografías. Es autor de la Visión Fotográfica, libro de referencia para introducirnos en la fotografía. Otros libros suyos son El Placer de Fotografiar, We were not There, Arts & Photographs y Las Fotografías de Burton Norton, que presentó en 2015 en el Círculo de Bellas Artes. Previamente, en 2013, Momeñe comisarió una exposición homónima en la que presentaba la narración fotográfica y textual de un viaje por el continente europeo que habrían llevado a cabo el desconocido Burton Norton, fotógrafo de Oxford, y su ayudante W.G. Jones, estudiante de literatura. La propuesta de Momeñe consistía en descontextualizar las imágenes para poner en cuestión la realidad de la fotografía.  Otros proyectos le han llevado a embarcarse en la serie de televisión para la ETB La Puerta Abierta (1988-1990), un programa de divulgación cuyo título procede de una fotografía de W.H. Fox Talbot; o la revista Fotografías (1993-1994), que en sus doce números publicó obras de nombres entonces emergentes como Javier Arcenillas, Bleda y Rosa, Javier Campano, Carma Casulá o Isabel Muñoz.  

Su primera individual la realizó en la Galería Nikon de Barcelona en 1974, año en el que publica un porfolio en Nueva Lente, la revista de fotografía más rompedora del momento. Desde entonces sus otografías han sido expuestas en galerías e instituciones de diferentes países y forman parte de colecciones públicas y privadas. Desde su estudio en Madrid ha realizado fotografías de moda, ilustración y retrato para revistas como Vogue, Marie Claire, Elle, AD o Style.

La exposición que inaugura en el Círculo de Bellas Artes viene acompañada por un catálogo que cuenta con la introducción de Juan Manuel Bonet titulada “Una pequeña maquinación o dos o tres cosas que sé sobre Eduardo Momeñe”. Para Bonet “Momeñe son muchos Momeñes: es una sólida base intelectual y mucha ficción, son máscaras, es una galería de espejos, y es todo verdad, incluso cuando construye teatrillos, novelerías, juegos sin fin».



  • ‘Retratos y otras ficciones’ de Eduardo Momeñe
  • Fecha: del 24 de octubre al 21 de enero.
  • Localización: Círculo de Bellas Artes. c/ Alcalá, 42. Madrid.
  • Rozas.
  • Horario: de martes a domingos, de 11.00 h. a 14.00 h. y de 17.00 h. a 21.00 h.
  • Entrada: 5 €.

ARTPRICE

 


RACISMO, DIVERSIDAD Y VIOLENCIA: LOS ARTISTAS CONTEMPORÁNEOS QUE MÁS HAN DESTACADO EN 2023





Como cada año, Artprice ha publicado el informe en el que analiza cuáles han sido los resultados del año en el mercado del arte contemporáneo. En líneas generales, este informe habla de una tendencia a la estabilidad frente a años anteriores en los que, tras la crisis sanitaria del Covid en la que las subastas estuvieron forzosamente paralizadas, se produjo un fuerte repunte, una especie de euforia. Esta moderación ahora, sin embargo, no es exclusiva del arte contemporáneo, sino la tónica general dentro del mercado.

Aun así, las cifras resultan positivas si tenemos en cuenta todo lo que jugaba en su contra este año: inflación, guerras, inestabilidad política, recesión... En total, el mercado contemporáneo ha generado más de dos mil millones de dólares, siendo esta la cuarta mejor cifra de la historia, 25 veces mayor, por ejemplo, de la que se obtuvo hace justo veinte años. Según subraya la plataforma, estos números hablan de la resiliencia del sector y de que, aunque los resultados palidecen si los comparamos con las cifras del boom pospandemia, el mercado contemporáneo sigue gozando de una buena salud.

Una de las principales peculiaridades de este periodo ha sido la cantidad total de lotes que han encontrado comprador, superando todos los récords con un total de 123.000. Esta cifra dobla la conseguida hace diez años, y es 100 veces mayor que la cantidad de obra contemporánea comprada durante los primeros años de la década de los 2000. También se ha experimentado un especial crecimiento en los lotes ofrecidos por menos de 5.000 dólares, sumando casi 99.000, lo cual supone un síntoma de la constante expansión del mercado.

Entre los 500 artistas contemporáneos encontramos pocas sorpresas, pues la mayoría de puestos altos del ranking de ventas en subasta están ocupados por los conocidos como blue chips, artistas consagrados cuya obra se considera una inversión segura, fiable. Basquiat lidera el podio, seguido por Yoshimoto Nara y Banksy. A continuación encontramos a Cecily Brown, de la que ya hablamos en El Grito y que sí ha despertado un interés muy por encima del experimentado en años anteriores, logrando recaudar más de 47 millones de dólares con tan solo 34 lotes y encarnando a la única figura femenina del top 10.

Después tenemos a los de sobra conocidos KoonsHaringHirst... y Mark Grotjahn, cuyas obras han cosechado más de treinta millones con la venta de tan solo 24 lotes. De forma similar a lo ocurrido con Brown, Grotjahn llevaba desde 2018 obteniendo cifras modestas en el mercado. Sin embargo, el año pasado sus lienzos plagados de figuras geométricas de colores sólidos y brillantes comenzaron a repuntar en el mercado. En 2023, el artista representado por el gigante Gagosian –donde tuvo una exposición individual el pasado mes de febrero– ha logrado que esa tendencia ascendente se mantenga en el tiempo.


(EL CONFIDENCIAL)

miércoles, 20 de diciembre de 2023

PARA REGALAR ARTE

 


Reportaje | Pintura para todos los bolsillos en la Feira da Arte Galega


La sala Rosalía de Castro acoge la exposición


“En esta feria nadie puede decir que no puede permitirse comprar arte, hay obras para todos los bolsillos, desde 50 hasta varios miles de euros”, explica Manuel Villarino, organizador de la XVI edición de la Feira da Arte Galega, un evento que se inaugura esta tarde y que permanecerá en el hotel Hesperia de Juan Flórez hasta el 5 de enero. El horario de visitas es de 11.00 a 14.00 y de 16.30 a 21.00 horas, con acceso gratuito.

Un total de 40 artistas de la comunidad exhiben en la sala Rosalía de Castro más de 1.500 obras originales “con variedad de técnicas y estilos”, comenta Villarino, quien destaca que hay piezas firmadas por autores de todas las edades, desde los consagrados –Peteiro, Lugrís, Abelenda, Elena Gago– a muchos emergentes. 


Para regalar

La organización indica que “cada edición es diferente a la anterior” y reconoce que se ha convertido en una tradición previa a Navidad. “Muchos buscan piezas para regalar o se las autorregalan. Es algo original, un artículo que cada vez vale más y que no caduca, como el resto de cosas”, señala Manuel Villarino, que añade que todos los artistas que participan en la muestra viven de esta disciplina y no la plantean “como un hobby”.


La Feira da Arte Galega también es un espacio importante para los coleccionistas, asegura, “y muchos se han iniciado en el coleccionismo con ella”. Villarino asevera que algunas piezas que se adquirieron en anteriores convocatorias de este evento “se han revalorizado hasta alcanzar el doble o más de su precio”.El objetivo es “quitarle a la gente la idea de que no puede permitirse comprar arte”. “Si puedes tener un móvil carísimo también puedes tener cuadros, nosotros con esta feria queremos acercar el arte a la ciudadanía y por aquí pasa gente de muchos lugares, es una cita de mucho éxito”, dice el organizador, que destaca la buena ubicación en el hotel Hesperia y las ventas que genera entre los huéspedes.


La Feira da Arte constituye, también, una oportunidad para los nuevos artistas de dar a conocer su obra. “Hay piezas de todos los estilos con paridad entre autores hombres y mujeres”, apunta Manuel Villarino. El evento será inaugurado esta tarde a las 20.00 horas con un acto oficial y la música en directo de Cristina Cachaldora & Fernando Pardiño.

(EL IDEAL GALLEGO)

ILUSIONES ÓPTICAS

 

Los detalles ocultos que esconden algunos de los cuadros más famosos del mundo






Hay cuadros capaces de dibujarse en nuestra imaginación con tan solo nombrarlos. Reliquias artísticas expuestas en museos que consiguen inspirar auténticos sentimientos de inspiración y asombro en cualquier persona. Desde ‘La joven de la perla’ de Johannes Vermeer, pasando por ‘El grito’ de Edvard Munch, hasta ‘La Mona Lisa’ de Da Vinci. Pero, ¿qué tienen en común casi todas estas magníficas obras? Además de ser sinónimo de etapas artísticas y emblema del don del arte, muchas de ellas esconden grandes secretos. Hoy te contamos los secretos ocultos de algunos de los cuadros más famosos del mundo.

‘La joven de la perla’, de Johannes Vermeer

Pintada en 1665, ‘La joven de la perla’ ha inspirado infinidad de libros y películas. Pero guarda un secreto muy especial… En su propio nombre. ¿Alguna vez te has parado a observar fijamente la perla brillante que cuelga de su oreja? Hazlo con detenimiento.


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ALGO SOBRE MUNCH

 


Munch, el pintor que logró convertir su dolor en arte en el siglo XX

Autorretrato con un cigarrillo, de Edvard MunchAFP

Las pinturas de Edvard Munch protagonizan dos exposiciones en Alemania, en Berlín y Postdam, que reviven el impacto que generó la pintura del autor de El grito y su influencia en el expresionismo alemán


El expresionismo con el que Edvard Munch desafió a Alemania dejó una huella imborrable en el país bávaro. Por este motivo, Berlín y Potsdam recogen su obra bajo dos exposiciones con premisas muy variadas.
Munch. Paisaje vital es el título y el programa de la nueva exposición del Museo Barberini de Potsdam. Esta exposición está enfocada en el desconocido Munch paisajista. «En los cuadros de Munch, la naturaleza estaba muy implicada y era coprotagonista», declara su directora, Ortrud Westheider.
«Con los paisajes de Munch hemos visualizado por primera vez la idea de que todo está interconectado en el ciclo de la naturaleza», apostillaba en la presentación de la muestra. Munch utilizó la pintura de la naturaleza como conductora de sus sentimientos.

Noche de verano en la playa de Edvard Munch, 1903

Desde el 18 de noviembre hasta el 1 de abril se expondrán 116 obras del artística nórdico. La primera sala de sus representaciones paisajísticas está centrada en los espacios naturales del bosque, el jardín y el campo, así como en las vacaciones de verano en la playa.
Esta exposición también presenta bocetos del genio noruego que se expusieron por última vez en Alemania hace más de 100 años. Estos boceto destacan la relación entre el hombre y la naturaleza y la continua exploración de esta por el ser humano.
Además, las pinturas con temática de paisajes de Munch han cobrado un nuevo sentido en el año 2023, según ha manifestado el director del museo: «En aquella época, la gente estaba más preocupada por una nueva glaciación y por eso veía el sol como fuente de vida». En cambio, en tiempos del cambio climático y el calentamiento global, las imágenes del pintor sobre el tiempo atmosférico han adquirido una nueva relevancia.

Una estrecha relación con Berlín

La Galería Berlinische también ha inaugurado una exposición centrada en la relación del artista noruego con la capital alemana, en la que vivió durante 20 años. El primer contacto de Munch con Berlín tuvo lugar el 12 de noviembre de 1892, cuando el artista inauguró con 29 años su primera exposición en la capital alemana.
Munch causó un gran escándalo debido al contenido de su muestra. Inaugurada con el título Cuadros al estilo de Ibsen, el público alemán se hizo a la idea de que encontrarían paisajes idílicos de Noruega. Sin embargo, el pintor mostró unas pinturas con bloques de color sólido y con apariencia abocetada. Sus obras estaban llenas de formas ondulantes, extrañas para la época.
Rojo y Blanco de Edvard Munch. 1899-1900

La modernidad radical de la pintura de Edvard Munch desafió radicalmente a sus contemporáneos. La exposición Magia del Norte cuenta la historia del pintor nacido en la ciudad de Ådalsbruk y Berlín a través de la pintura, el arte gráfico y la fotografía.
Con cerca de 65 exposiciones, entre ellas muchas individuales, Berlín se convirtió en uno de los lugares de exposición más importantes de Europa para Munch entre 1892 y 1933 tras su marcha a Noruega. En la capital alemana aprendió técnicas de grabado gracias a la importantes imprentas berlinesas.
La exposición se compone de 80 obras de Munch, además de otras pinturas de artistas que despertaron la pasión berlinesa por el mundo nórdico para ayudar a contextualizar la época, como Walter Leistikow y Akseli Gallen-Kallela.

JAVIER PAREJA (EL DEBATE)


jueves, 7 de diciembre de 2023

SOROLLA Y MADRID

 

Los paseos por El Retiro, la casita de Tirso de Molina o las visitas a Lhardy: el Madrid de Sorolla

El genial pintor valenciano dejó una importante impronta en la capital. El Prado, El Retiro, El Rastro y su casa, ahora museo, fueron algunos de los enclaves que nos sirven para conocer su figura



Qué une a Benito Pérez GaldósPío BarojaMaruja Mallo y Joaquín Sorolla más allá de haber sido de figuras relevantes de la cultura española de las últimas décadas? El acertijo se resuelve pronto si se focaliza la mirada en José Luis Martínez-Almeida, alcalde de la capital, ya que es bajo su mandato cuando estos cuatro personajes ilustres han tomado la consideración de Hijos Adoptivos de Madrid.

 

Sorolla ha sido el último en llegar a esta florida lista, y lo hace justo cuando se cumplen 100 años de su fallecimiento en Cercedilla. Este artista valenciano, el pintor de la luz y del mar, pronto se estableció en el epicentro radial del país. Pasen y vean los lugares más señalados, aquellos donde Sorolla dejó su impronta. Bienvenidos, bienvenidas, al Madrid de Sorolla.

El Prado como refugio

La conservadora del Museo Sorolla, Sonia Martínez, relata que la primera vez que el pintor pisó Madrid fue en 1881: "Tomó parte de la Exposición Nacional de aquel año. Era muy jovencito, no tenía ni 20 años, y las tres marinas que presentó no tuvieron mucho éxito, pero aprovechó su paso por la capital para conocerla". De esta forma, una de sus primeras paradas tuvo lugar en el Museo Nacional de Pintura y Escultura, posteriormente llamado el Museo Nacional del Prado.

"Aprovecha para imitar a los grandes maestros, a los del Siglo de Oro. Ellos siguen siendo, sin duda, las referencias tanto en ese momento como en la actualidad dentro de la veta artística", añade la experta. De hecho, tal es la asiduidad con la que Sorolla se paseó por El Prado que llegó a aparecer en su registro de copistas: "El Museo tiene este servicio propio, donde te apuntas y dices qué cuadro quieres replicar, y él aparece en este libro de copistas, y aparece como Sorolla, pero con otro nombre", especifica Martínez.

 

Sus posteriores paradas por Madrid casi siempre le llevarán a recalar en el Museo del Prado. De aquel tiempo, los primeros años de la década de los 80 del siglo XIX, el Museo Sorolla de Madrid atesora varios cuadros. Ejemplo de ello son una copia de un fragmento de Las Hilanderas y del Menipo, originales de Velázquez. El artista también fijó su mirada en cuadros de Ribera y El Greco.

Los paseos de Sorolla por El Retiro

Lo que décadas después se convertiría en el pulmón verde del centro de Madrid, un día fue el protagonista de la inspiración del pintor valenciano. El Parque de El Retiro aparece en varias de sus pinturas. Hablamos de su obra Vista del embarcadero del parque del Retiro, que realizó en 1882. A ella se suman otras tantas pequeñas producciones llevadas a cabo al aire libre.

Sala I de la exposición en honor a Sorolla. (Ministerio de Cultura)

Así, hasta nuestros días han llegado Portada del Hospital de La Latina y Casería de barrios bajos madrileños, pintadas ambas en 1883, por poner varios ejemplos de las cinco obritas que se conservan. A su vez, los paseos de Sorolla por la capital le granjeaban una importante fuente de inspiración. De hecho, fue otra fuente, la Fuente de Apolo, sita en el Paseo del Prado, la que también decidió inmortalizar con su preciso trazo.

 

"Él se levantaba pronto y salía a pasear. Al menos, eso es lo que cuentan los compañeros que estudiaron con Sorolla en Valencia. Cuando iban a formarse a la escuela, Sorolla ya llevaba años paseando y pintando la ciudad", añade Martínez.

Las casas, los tejados

El trasiego de idas y venidas desde su querida Valencia hasta la meca del negocio del arte, Madrid, le hizo decidirse por establecerse en esta segunda ciudad a partir de 1890. "Entiende que tiene que estar en el epicentro artístico, el lugar en el que pueden surgir los encargos", comenta al respecto la especialista. Y lo hace una vez retornado de Italia, donde estudia gracias a una beca, y tras haberse casado con Clotilde García del Castillo, una de sus musas.

                           Saltando a la comba, La Granja, obra de Joaquín Sorolla. (Cedida)

El primer enclave en el que esta pareja con una hija ya intenta formar un hogar estuvo situado en la plaza del Progreso, hoy en día llamada Tirso de Molina. "Eso lo sabemos porque cuando se inscribe en las exposiciones, Sorolla pone esa dirección", señala Martínez. Allí es donde el maestro llevaba a sus alumnos a aprender pintura. De hecho, en Caseríos de barrios bajos madrileños aparecen las típicas cubiertas de los tejados de los barrios del sur de Madrid.

El Rastro, rastreado

En realidad, Martínez trabaja junto a Sonia Taravilla en una monografía que repasará este Madrid de Sorolla y estará editada por Palacios y Museos. Taravilla es técnica de museos en el Ministerio de Cultura y experta en la historia de la capital y afirma que el artista valenciano se dejaba caer por el mítico Rastro: "Sabemos que compró una canastilla de bebé para su hija y que expusimos en el Museo Sorolla hace unos años".

 

Sus investigaciones para la confección del libro les han llevado a certificar que Sorolla visitó en alguna ocasión el Lhardy, el clásico pub y restaurante cercano a la Puerta del Sol que cobijó a grandes figuras artísticas de la Historia de España. "En sus epistolarios menciona que iba al café, pero no a las tertulias como tal", añade Taravilla.

Su casa, nuestro Museo

Poco a poco, el pintor fue cambiando de lugares en los que habitar. Pasó también por un estudio en el paseo de la Alhambra, en la actual zona de Chueca, curiosamente muy cerca de donde actualmente se ubica el Ministerio de Cultura. Aquello se lo alquiló a su amigo y pintor José Jiménez Aranda en 1893. Años más tarde, en el todavía llamado Paseo del Obelisco, o Paseo del General Martínez Campos, un Sorolla mucho más maduro decidió levantar su vivienda definitiva, también su estudio. Es lo que hoy conocemos como Museo Sorolla.


La conservadora de este impresionante enclave cuenta que el pintor mandó construirlo a su gusto, una vez que sabía bien lo que quería tras haber transitado por varios estudios. El edificio lo construyó Enrique María de Repullés, y "Sorolla trabaja estrechamente con él para irle indicando qué y cómo quiere las cosas", en los términos de Martínez. A finales de 1911, esa será su casa, pero no solo, pues también será su estudio.

 

Sorolla mandó levantar tres estancias, lo que a día de hoy son las salas del Museo visitables y dedicadas a su trabajo como pintor. "Es el típico estudio de un artista, con esas claraboyas y aperturas cenitales en el techo para que haya luz por todos los lados. Es cierto que a él le gustaba mucho pintar del natural, pero a veces tenía que usar el estudio", se explaya esta especialista. El lugar también servía para la distensión gracias a esos jardines replicados de los que Sorolla había disfrutado en Italia y Andalucía. "Y lo replica todo, también las fuentes, esculturas clásicas y la presencia de azulejos", concluye la propia Martínez.


(EL CONFIDENCIAL)

JOSÉ MANUEL BALLESTER

 

La Lonja del Pescado de Alicante presenta la exposición 'José Manuel Ballester. De Mondrian a Malevich'


La muestra, comisariada por Rafael Sierra, podrá visitarse en la sala municipal hasta el 31 de marzo de 2024.


José Manuel Ballester, ante las obras que componen la muestra.



La Sala de exposiciones de la Lonja del Pescado acoge desde el pasado viernes la exposición José Manuel Ballester. De Mondrian a Malevich, que podrá visitarse hasta el 31 de marzo de 2024.

Esta muestra, comisariada por Rafael Sierra, es fruto de la colaboración entre la Fundación Colección Roberto Polo y el Ayuntamiento. Alicante es la primera ciudad a la que itinera después de estar expuesta en Toledo y la primera vez que se ven las series completas de Mondrian y Malevich puesto que en Toledo se mostraron incompletas. La exposición consta de 69 obras entre fotografías, dibujos y 5 vídeos.

En la exposición, el artista madrileño reinterpreta a Piet Mondrian y Kazimir Malevich y analiza en esta exposición la obra de dos de los más universales exponentes del arte abstracto y geométrico en la Historia: el neerlandés Piet Mondrian (1872 -1944) precursor del neoplasticismo y el ucraniano Kazimir Malevich (1878-1935, creador del suprematismo).

La edil de Cultura, Nayma Beldjilali ha querido destacar "la importancia de la colaboración entre las instituciones, ya que permiten, como ocurre en el caso de la muestra que hoy se presenta, traer a la ciudad, exposiciones de este nivel y calidad".

El artista

Jose Manuel Ballester (Madrid 1960), Pintor y fotógrafo, licenciado en Bellas Artes en 1984 por la Universidad Complutense de Madrid. Premio Nacional de Grabado en 1999. Premio Goya de Pintura Villa de Madrid y posteriormente en 2008 el Premio de Fotografía de la Comunidad de Madrid. Premio Nacional de Fotografía 2010. Premio trayectoria 2023 Fundación Enaire.

Su carrera artística comenzó en la pintura con especial interés por la técnica de las escuelas italiana y flamenca de los siglos XV y XVIII. A partir de 1990, empezó a conjugar pintura y fotografía. Sus obras forman parte de los fondos del Centro de arte Reina Sofía (MNCARS), Museo Marugame de Arte Contemporáneo Español de Japón, IVAM de Valencia, Pérez Art Museum y Cisneros Fontanals Art Foundation de Miami, Central Academy of Fine Arts de Pekín, Patio Herreriano de Valladolid, 21 Century Museum de Kentucky, Museo Würth de Logroño, Fundación Telefónica, Banco Espíritu Santo en Lisboa, Pinacoteca del Estado de Sao paulo, Museo Guggenheim de Bilbao, colección Iberdrola, Colección Cristina Masaveu Peterson, Fundación Enaire, Fundación Engel, Pérez Art Museum, Fundación Coca-Cola y Museo del Prado entre otros.


(EL ESPAÑOL)